Los 2 Conciertos de Liszt y Totentanz acaban de salir en un disco de Naxos (8.571273), a cargo de la pianista turca Idil Biret y la Orquesta Sinfónica de Bilkent (una ciudad del mismo país) dirigida por Emil Tabakov (grabaciones de 2004 y 2007). Pues bien, para mí estas versiones de los Conciertos, inesperadamente, se sitúan sólo por detrás de las geniales de Claudio Arrau, la London Symphony y Colin Davis (Philips). Versiones tan reputadas como las de Berman/Giulini, Zimerman/Ozawa, Richter/Kondrashin o Brendel/Haitink me gustan claramente menos que ésta. No os la perdáis.
El programa Ravel que acaba de lanzar EMI (9663422), con la Segunda Suite de Dafnis y Cloe, los Valses nobles y sentimentales, La Valse y Mi madre la oca, a cargo de la Orquesta Filarmónica de Rotterdam y su director, Yannick Nézet-Séguin, es estupendo. Atención a este joven director canadiense, parece que fichado por EMI. Lo primero que le escuché fue el DVD de Romeo y Julieta de Gounod en D.G.; en la crítica para “Ritmo” escribí (marzo de 2009): “Tomen nota del nombre de este director. Estoy convencido de que se hablará mucho de él… es muy evidente que tiene un talento muy por encima de lo habitual”, etc. Pues bien, el programa Ravel reafirma este gran talento. Pero esto no es nada: mi amigo Fernando López Vargas-Machuca me ha pasado una reciente retransmisión de una Séptima de Bruckner al frente de la Filarmónica de Londres (de la que ha sido nombrado principal director invitado) que es impresionante, gloriosa, lo mismo que unos fragmentos de la Octava del mismo compositor que pueden escucharse en su página en internet. Y estas obras ya son palabras mayores. Seguiremos atentos la carrera de este hombre.
Pentatone (PTC 5186126) publicó hace unos meses una sinfonía de Haydn por Colin Davis inédita en CD: se trata de una maravillosa versión de la No. 88, grabada en 1975 al frente de la Concertgebouw de Amsterdam. Estamos ante una de las dos o tres mejores de las que tengo recuerdo: sencillamente ejemplar, una pura maravilla. Y suena muy, muy bien. Lástima que haya sido acoplada con una –la 99- que ya estaba en CD y con una correcta pero insulsa Primera de Beethoven, con la Sinfónica BBC.
Termino con un Blu-Ray (también ha salido en DVD) que me ha dejado “tocado”: la ópera Orfeo y Eurídice de Gluck, cantada en alemán (versión “autorizada” por el compositor), muy bien por cierto (Maria Riccarda Wesseling, Julia Kleiter y Sunhae Im) y soberbiamente dirigida por Thomas Hengelbrock, con un dramatismo y emoción impactantes. Pero lo más singular de esta publicación, lo que hace de ella una auténtica obra de arte, es la coreografía de la genial Pina Bausch, que data de 1975 pero que no ha pasado y dudo que llegue alguna vez a pasar de moda. Baila el Ballet de la Ópera de París (en 2008), con tres solistas extraordinarios: Yann Bridard, Marie-Agnès Gillot y Miteki Kudo. La marca de esta joya es BelAir, y el nº de catálogo, BAC444.
Estimado señor Carrascosa.
ResponderEliminarA raíz de su comentario he comprado los dos primeros discos que comenta y estoy de acuerdo con usted en que son dos interpretaciones excelentes. No obstante, para el 2º de Liszt me sigo quedando con Richter y Kondrashin.
Un saludo.