La Traviata, Rigoletto y Tosca
en Blu-ray
El 20 de junio comentaba aquí
el filme "Rigoletto en
Mantua" de Marco Bellocchio. Nada más enterarme de que ese DVD original
del sello NVC Arts/Warner ha pasado a Naxos (NBD0052-54), me he hecho con este
álbum (que sale francamente barato), un triple Blu-ray que, además de esa
ópera, incluye una Traviata y la
famosa Tosca filmada el año 1992 en
los escenarios originales en Roma, con Malfitano, Domingo, Raimondi y Mehta. La
caja, muy bien presentada, contiene un libro de 164 páginas a todo color (por
lo que no entiendo cómo puede estar tan barata -poco más de 50 €- ya que el
papel en color encarece mucho estos productos).
Bien, como esta soberbia
interpretación de Tosca es muy
conocida y ha sido editada varias veces en DVD y Blu-ray, comentaré La Traviata, que, como las otras dos
óperas, viene con subtítulos en español. Esta obtiene la menos buena de las
tres interpretaciones, pero creo que el conjunto del álbum es suficientemente
valioso como para transigir con ella. El director del film es el mismo que el
de Tosca, Giuseppe Patroni Griffi,
pero me atrevo a afirmar que lo más decisivo en lo visual de ambas óperas es la
dirección de fotografía y la dramaturgia del genial Vittorio Storaro (el de Novecento, Apocalypse now, El último
emperador, El último tango, Rojos, Tango (Saura), Goya en Burdeos...), que
también tiene a su cargo la de Rigoletto,
aunque en esa pinta claramente más
que en las otras dos el director Bellocchio. Filmada igualmente no en un teatro
de ópera sino en escenarios naturales de París o alrededores, en esta Traviata (2000) se han pasado bastante
en suntuosidad: la mansión de Violetta del primer acto es lujosísima,
maravillosa, encantadora la casa de campo del acto II, es en el domicilio de
Flora donde se les ha ido la olla... Menos mal que la casa de la arruinada
Violetta del acto III es discreta... A señalar que el problemático baile de las
gitanas está bien resuelto, pero no así el de los toreros, con un Antonio
Márquez mucho más tolerable para extranjeros despistados que para españoles.
A diferencia también de los
otros dos títulos, los actores de Traviata
están deficientemente dirigidos y distan de ser tan buenos como los demás: es
el mismo responsable de Tosca, pero en
esta tanto Malfitano como Domingo y Raimondi se las saben todas... Bueno, se
salva bastante la protagonista, Eteri Gvazava (Siberia, 1969). Soprano de escaso
recorrido discográfico, sin embargo está bastante bien, sobre todo en los dos
últimos actos; en el primero tiene algunos problemas con la coloratura e
incluso, ocasionalmente, de afinación. La voz, un pelín opaca y sin el deseado
brillo, no conquista, pero su encarnación de la desgraciada protagonista se va
volviendo más y más convincente. El tremendo borrón no ya de esta ópera sino de
toda la caja es el Alfredo de José Cura. Hay dos motivos principales que lo
descalifican: 1º es muy inadecuado para un papel que es lírico cuando él
entonces ya poseía una voz bastante ancha, y 2º y mucho más importante: ¡es
malo! Sí, es un cantante carente de musicalidad, de elegancia, de técnica,
monocorde e inexpresivo a tope. A su lado, un muy envejecido, fatigado Rolando Panerai
(76 años), que había sido un excelente barítono, merece reproches menores. Más:
la dirección de Zubin Mehta, siempre con los francamente buenos I Solisti
Cantori y con la en teoría regular Orquesta Sinfónica Nacional de la RAI, de la
que vuelve a obtener un estupendo rendimiento, me convence menos que en Tosca (batuta digna de un 9) o que en Rigoletto (de 9,5). Y ello a causa de
darle en mi opinión un énfasis, una solemnidad excesivos. No le pondría más de
un 8. Pero es que ningún director que yo conozca ha merecido en una grabación,
de audio o de vídeo, de La Traviata más
de un 9. También el sonido es un poquito menos bueno que en las otras dos, en
las que es estupendo. Las imágenes son en todos los casos de gran nitidez y
belleza (en el Blu-ray; en el DVD no lo sé). (Nota jocosa: la traducción de los
subtítulos, en general pasable, deja claro que ha sido hecha no del italiano
sino del inglés, y por una persona que no conocía gran cosa el argumento de la
ópera. Dos ejemplos: en el acto I, cuando los invitados piden que se proceda a
brindar: "Sì, sì, un brindisi", se traduce: "Sí, sí, una
tostada" [toast= tostada; brindis].
O cuando, en el acto II, Germont le dice a la desconsolada y deshecha en
lágrimas Violetta que se desahogue: "Piangi, piangi" ["Llora,
llora"] el subtítulo dice: "Grita, grita" [to cry: llorar; gritar]...)
No hay comentarios:
Publicar un comentario