Anja Kampe, Falk Struckmann, Kwangchul Youn, Peter Mattei, Mojca Erdmann... y Klaus Florian Vogt
El extraño sello Musicom (nunca había sabido de su existencia) ha publicado la versión escénica de Fidelio que Barenboim dirigió en La Scala milanesa el año 2014 (en concreto el día de San Ambrosio, 7 de diciembre, inauguración de la temporada). Pero es una publicación que se queda corta: al parecer contiene el audio de la ópera completa, pero también un DVD, con solo una selección de apenas una hora de duración: menos de la mitad del total (por cierto: durante los créditos finales suena, entera, la imponente Marcha que precede a la aparición de Don Pizarro).
Es una verdadera lástima, pues es el único documento audiovisual de la ópera del compositor al que más se asocia a este pianista y director (bueno, junto con Wagner). Ya en Madrid dirigió el de Buenos Aires una interpretación memorable con sus huestes de la Ópera Estatal de Berlín, en junio de 2001 (reparto: Deborah Voigt, Thomas Moser, René Pape, Sergei Leiferkus, Simone Nold, Stephan Rügamer, Hanno Müller-Brachmann. Director de escena: Stéphane Braunschweig), pero fue filmado solo para los archivos del Teatro Real, con muy pocas cámaras y sonido precario.
Así que otra oportunidad perdida la de trece años después. La dirección no ha sido menos extraordinaria: dramática, emotiva, entusiástica -y excelentes el Coro y la Orquesta italianos-. También la escena de Deborah Warner -a juzgar por la selección- me ha parecido acertada, dentro de un enfoque muy tradicional, aunque la acción se haya trasladado a nuestros días. El hecho de que, cuando se descubre todo el pastel, Don Pizarro huya a todo correr y se pegue un tiro, me parece muy coherente.
El elenco milanés ha sido muy sólido, pero con un buen borrón: el Florestán de Klaus Florian Vogt, ese más que buen tenor lírico-lírico que vive de cantar partes dramáticas, como esta. Menos mal que, en lo escuchado, no está tan melifluo como en otras ocasiones, pero su voz blanquecina no cuadra para nada con el personaje. No hay más que fijarse en el listado de algunos de los principales tenores que han grabado Florestán: Helge Rosvaenge, Wolfgang Windgassen, Jon Vickers, James McCracken, James King, René Kollo, Siegfried Jerusalem, Ben Heppner, Peter Seiffert, Plácido Domingo (estos dos en su etapa dramática), Jonas Kaufmann… (creo recordar que en su día alguien me dijo que el tenor previsto en un principio en La Scala era este último: ¡menuda diferencia con Vogt!).
Soberbia la Leonore de Anja Kampe, lo mismo que el Pizarro de Falk Struckmann y el Don Fernando de Peter Mattei. Suficiente el Rocco de Kwangchul Youn (voz no muy potente, pero hermosa, y muy buen cantante e intérprete). Demasiado ligera la notable Mojca Erdmann (Marzelline) y muy bien Florian Hoffmann como Jaquino. La calidad del DVD es excelente, tanto por su imagen como por su sonido. Lo dicho: una pena que no haya sido publicada la versión completa de la ópera.
Pues sí, una pena, porque era una gran oportunidad para disponer de esa interpretación con todas las imágenes. Además, aquel año Fidelio era la apertura de temporada en la Scala, así que como se retransmitió por televisión y para cines de todo el mundo, es seguro que el documento audiovisual con la ópera completa existe. A ver si algún sello lo saca completo. Esto recuerda a lo del Mesías de Colin Davis de LSO Live, que sólo salió completo en audio; en la misma caja la orquesta incluía una selección en vídeo, pero mirando en YouTube (y sin necesidad de buscar mucho) podía y puede verse la filmación completa.
ResponderEliminarDe lo que es la función, me acuerdo bien, porque la escuché en su día por la radio. Y estoy de acuerdo contigo, Ángel. Por cierto, Barenboim llevó otra vez al comienzo de la ópera la Leonora II, en lugar de la obertura compuesta expresamente para la versión revisada de Fidelio. Ya lo hizo en su grabación comercial de Teldec y volvió a hacerlo en esta ocasión.
Una pena que no esté publicado completo. Aun así, ¿sabe que puede ver esa representacion en el canal medici.tv ? Aquí esta el enlace:
ResponderEliminarhttps://www.medici.tv/en/operas/beethoven-fidelio-daniel-barenboim
Justo Romero vuelve a la carga: que músicos a los que ha admirado muchísimo (bueno, no tanto en algún caso, que recordamos cosas que había escrito...), como son Domingo, Pollini y Barenboim, están ya acabados. Tres casos muy dispares cuya ligazón es puro oportunismo y demagogia. En el caso de Barenboim es claro que no ha escuchado -o no ha sabido apreciar- algunas interpretaciones suyas de hace solo unos días, por ejemplo una genial e hipercreativa interpretación de la Iberia de Debussy. Un intérprete acabado no podría, de ningún modo, lograr algo así, sino que habría caído, como mucho, en la rutina. Una vez más no escucha, o no entiende lo que escucha. No hace falta recordar que Klemperer, Böhm, Karajan o Celibidache alcanzaron varias de sus mayores genialidades muy mayores y en un estado físico tremendamente disminuido.
ResponderEliminarEn realidad, Justo Romero no decía que estuviesen acabados, sino algo mucho más ruin: que son "momias vivientes". ¡Hace falta ser una mala persona, carente de la má mínima empatía, para utilizar esa expresión! Y que no pocos músicos se solidarizasen con ese abyecto artículo me parece que también dice bastante de ellos. Hipócritas, entre otras "cualidades".
EliminarGracias al "soplo" de Anónimo del 23 de agosto, he podido llegar a ver y escuchar este Fidelio completo. La filmación emitida por Medici TV tiene una calidad claramente profesional, tanto la nitidez del sonido como la de la imagen y la cuidada realización: un producto para ser editado en blu-ray, pero que no lo ha sido. ¡Y vaya si lo merecería! Escuchado completo y de seguido se aprecia que fue una función para despertar el entusiasmo que, de hecho, despertó en el público al terminar. Pese al borrón de K.F.Vogt, la versión fue globalmente memorable. Lo que más me ha llamado la atención ha sido la impresionante actuación de una orquesta teóricamente poco beethoveniana como es la de La Scala. Cuando Barenboim la subió en pleno al escenario -él no salió nunca solo- se produjo la mayor ovación de la noche, más incluso que la encendida que recibió Anja Kampe. Un mérito añadido del director musical, del que me atrevo a decir que es la mejor dirección que he escuchado hasta la fecha en esta ópera (y tengo bien presentes a Furtwängler, a Klemperer, y al propio Barenboim en su grabación de audio).
ResponderEliminarEl primer preso, Oreste Cosimo, demuestra en su breve intervención una voz de tenor de primera calidad.
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