sábado, 5 de junio de 2021

Barenboim vuelve a Debussy por todo lo alto

 

Martha Argerich

Deutsche Grammophon acaba de publicar un CD con un interesante, atípico y variado programa Debussy cuyo denominador común es Barenboim dirigiendo o tocando el piano. La Fantasía para piano y orquesta es una poco conocida composición del período juvenil (1889-90), un poco anterior al Preludio a la siesta de un fauno (1892-94) que le consagró como un genio innovador. Es la Fantasía su única obra para esa disposición y no es aún muy característica de su autor -quien sin embargo siempre la tuvo en alta consideración- pero en todo caso me parece que es injustamente no muy frecuentada. Varios intentos de estrenarla fueron frustrados. En 1909 Debussy transmitió a Edgar Varèse su intención de retocar la orquestación, algo que no llegó a realizar. Fue finalmente dada a conocer en 1920, dos años después de la muerte del autor. Concierto un tanto especial, enmascarado y atípico, para piano y orquesta, de casi 24 minutos, se divide en tres partes que se tocan sin interrupción -Andante ma non troppo-Allegro giusto, Lento e molto espressivo y Allegro molto-, su ejecución exige un considerable virtuosismo por parte del solista.

Michael Barenboim

El disco da un salto hasta finales de la vida de Debussy, con sus Sonatas para violín y piano (1917) y para cello y piano (1915), y se cierra con El Mar (1903-05), la única obra que Barenboim había grabado anteriormente de modo “oficial” (París, DG 1978; Chicago, TDK 2000 y Teldec 2001). En la Fantasía, Martha Argerich demuestra una vez más que ha hecho un pacto con el diablo: ¡cómo se puede tocar así a sus 79 años! Es un prodigio de agilidad, limpieza, precioso sonido y legato: una maravilla. Ni siquiera Sviatoslav Richter (en una grabación pirata de 1983, con Barenboim y la Orquesta de París) me gusta tanto como ella aquí, arropada además por un trabajo orquestal minucioso y pleno de atmósfera. Esta versión, increíblemente bien grabada como todo el disco, es toda una revelación.

Kian Soltani

En la Sonata para violín, Michael Barenboim está no ya irreprochable, sino cabal de principio a fin: puede que no sea uno de los grandes virtuosos actuales, pero es un músico de los pies a la cabeza y, supongo, se beneficia no poco de los consejos de su padre. Lo cierto es que ambos nos ofrecen una interpretación redonda. Hasta el punto de que solo me habían gustado a un nivel equivalente las de Kyung-Wha Chung con Radu Lupu (Decca 1979) y Janine Jansen con Itamar Golan (Decca 2011). En cuanto a la Sonata para cello, esta versión es simplemente la mejor que recuerdo, por delante de Rostropovich/Britten (Decca 1962) y Starker/Sebök (Mercury 1964). Kian Soltani, un joven excepcionalmente dotado, y un Barenboim pletórico dan realmente la campanada.

Otro “Mar”

¿Y El Mar? ¿Por qué habrá vuelto Barenboim a grabarlo? Supongo que por varias razones: es apreciablemente diferente de los suyos anteriores; quizá es el más turbulento y visionario, y hasta ocasionalmente aterrador, y porque descubre en varios pasajes texturas orquestales que nunca antes había yo escuchado, lo que a estas alturas no es fácil en una obra tantas veces grabada y de la que se han ocupado prácticamente todos los directores importantes. Tampoco se priva de lucir que su Staatskapelle Berlin, tan alemana ella, se puede adaptar también a lo francés como un guante. No quiero dejar de señalar actuaciones formidables del grupo de violonchelos, del oboe y la trompeta solistas. Esta versión se añade, pues, a la lista de mis favoritas: Barbirolli/Orquesta de París (EMI 1969), Tilson Thomas/New Philharmonia (Sony 1983), Sinopoli/Philharmonia (DG 1990), Muti/Filadelfia (EMI 1994) y las dos de Barenboim con Chicago.  

8 comentarios:

  1. Estaba esperando que se liberara este disco y coincido con usted en todo, salvo que yo no conocía la Fantasía. Por cierto, que creo que Argerich ha cumplido hoy más bien 80, ¿o sea que 79 tenía en el momento de la grabación? Me vuela la cabeza de todas formas. A propósito, también tengo morbo por escuchar ya completos los conciertos de Beethoven con Zimerman y Rattle: me temo que la comparativa con su ciclo "incompleto" con Bernstein será a favor del último.

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    1. Sí, Argerich cumple hoy, 5 de junio, los 80: ¡felicidades, Martha!
      Escuché algo de los Conciertos de Zimerman/Rattle, y sí, me gustó bastante menos que los que hizo el pianista polaco con Bernstein. Pero habrá que escucharlos completos. (Me da un poco de pereza...)

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  2. Precisamente ahora estoy escuchando este disco de Barenboim en Qobuz. De momento, de acuerdo en sus apreciaciones. Por otro lado, ¿ha podido escuchar otra reciente novedad de DG con Yannick Nézet-Séguin en un recital de piano solo ("Instrospection")? La verdad es que me ha sorprendido positivamente. Técnicamenete no son obras complicadas pero están creo que muy bien interpretadas.

    Un saludo

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    1. También tengo intención de escuchar a Yannick tocando el piano. Ahora mismo estoy con las Sonatas y Variaciones de Beethoven para cello y piano por Ma y Ax.

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  3. Excelentes Ma y Ax, el álbum de 22 CDs de SONY es estupendo. Entre Ma/Ax y Barenboim/Jackie, creo que es difícil quedarse con uno, ¡¡mejor los dos!!

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    1. ¡Hombre, el dúo Ma/Ax es estupendo, ha hecho muchas cosas estupendas! ¡Pero el de Barenboim/Jackie es de otro nivel, rondando casi siempre la pura genialidad! ¿Qué opinan otros lectores sobre esto? ROGER.

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  4. Aprovecho esta entrada dedicada a Barenboim padre e hijo para señalar que acaba de salir en el sello Peral el concierto de violin de Beethoven con Michael y Daniel Barenboim y la West-Eastern Divan Orchestra.
    Un saludo

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    1. Gracias por la información. Me has cogido escuchando (en Qobuz) este disco, que me está pareciendo más que bien.

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