miércoles, 6 de noviembre de 2019

Dos óperas poco conocidas del siglo XX, en blu-ray


Das Wunder der Heliane, de Korngold
 
Estrenada en 1927, El milagro de Heliane no ha llegado a alcanzar la divulgación de Violanta (¡de 1916, compuesta a los 19 años!), y menos aún la de La ciudad muerta (Die tote Stadt, 1920). Pero es también una ópera estimable. Un año posterior a Die Frau ohne Schatten (La mujer sin sombra) de Richard Strauss, tiene en común con esta el argumento un tanto fantástico y pretencioso y el empleo de una orquesta enorme, pero la diferencia radical entre ambas es, frente a la genialidad de la del autor de Elektra, una inspiración de escaso vuelo de la del precoz compositor austrohúngaro. “Mucho ruido y no tantas nueces” podría aplicársele, mucho oficio y no tanta auténtica emoción. Lo mejor de la partitura, siempre muy bien instrumentada, es, me parece, el tercer y último acto, en el que Korngold logra una mayor elevación. 

Lo que sí encuentro es que la interpretación de estas representaciones (30 de marzo y el 1 de abril de 2018) en la Ópera Alemana de Berlín, del sello Naxos, es muy destacada, si bien no tanto como la de audio de Decca 1993, a cargo de John Mauceri con un plantel de voces aún más sobresaliente: Tomowa-Sintow, De Haan, Welker, Runkel, Pape y Gedda. Me ha gustado mucho la protagonista, Sara Jakubiak, una soprano lirico-spinto muy relevante. En cuanto a Brian Jadge (el Extranjero), un tenor dramático, no está nada mal: su centro, un punto baritonal, es sólido, si bien arriba pierde algo de proyección. De los seis personajes principales, quien menos me ha convencido es Josef Wagner (el Soberano), un barítono algo monocorde, apenas capaz de matizar. Bastante bien el barítono-bajo Derek Welton (el Portero), y excelente Okka von der Damerau (la Mensajera), mezzo bastante dramática, una soberbia voz y no menos buena cantante. Timbre algo desagradable el del tenor (tipo Mime) Burkhard Ulrich (el Juez ciego). Muy bien el nutrido coro, con gran papel en la ópera, y bastante bien la orquesta, dirigida con talento por Marc Albrecht. La escena, nada caprichosa, a cargo de Christoph Loy, me ha parecido irreprochable. Buen sonido y estupenda imagen. Hay subtítulos en cinco lenguas, entre las cuales no está el español. Por cierto, se añade como curioso bonus la grabación en audio de 1928 (¡que suena muy bien para la época!) del Intermedio, a cargo de la Orquesta de la Ópera Estatal de Berlín dirigida por Frieder Weissmann (1893-1984), director de origen judío que hubo de abandonar Alemania en 1933. 

Vanessa, de Barber

Las dos óperas de Samuel Barber, Vanessa (1958) y Antony and Cleopatra (1966), parecen, a decir verdad, haber sido compuestas mucho antes, debido a su lenguaje bastante conservador. Pero son notables, ya que no, desde luego, obras maestras. Pero la primera de ellas, que acaba de aparecer en blu-ray del sello Opus Arte, se escucha con apreciable placer e interés, a lo que contribuye el libreto de Gian Carlo Menotti. La versión es buena, si bien claramente por debajo de la de los intérpretes del estreno: Eleanor Steber, Nicolai Gedda, Rosalind Elias, Giorgio Tozzi y Regina Resnik, con el Coro y la Orquesta del Metropolitan de Nueva York dirigidos por Dimitri Mitropoulos (RCA 1958). 

Me ha gustado particularmente la puesta en escena, tan sensata como bella plásticamente, de Keith Warner. También la dirección musical es espléndida: el director moravo Jakub Hrusa (n. 1981) es, con razón, uno de los más pujantes de su generación. Titular de la Sinfónica de Bamberg, es también uno de los dos principales invitados de la Philharmonia. La soprano (lírica ancha) Emma Bell es una protagonista muy convincente, tanto en lo vocal como en lo escénico. En realidad, todos los cantantes están muy bien en este último aspecto, mérito en parte, sin duda, del régisseur. Edgaras Montvidas (Anatol) es un notable tenor lírico, como la mezzo (muy lírica, casi una soprano) Virginie Verrez en el papel de Erika. Bien el bajo Donnie Ray Albert (el viejo Doctor) y más aún la muy veterana (69 años) Rosalind Plowright (la vieja Baronesa). Filmada en Glyndebourne el 14 de agosto de 2018 con el Coro de dicho Festival y la Orquesta Filarmónica de Londres, según los previsibles estándares de calidad, tampoco contiene subtítulos en castellano, sino justamente en los mismos idiomas que la ópera anterior: inglés, francés, alemán, japonés y coreano. Los países hablantes de estas lenguas no deben de ser tan aficionados a la piratería como nosotros.

1 comentario:

  1. ¿Angel, que te parece el premio el ojo crítico a Ruth Iniesta?...precisamente la acabo de ver/escuchar en una segunda de Mahler que me ha encantado....en general me parece una chica que canta estupendamente.....y además muy guapa...

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