“Macbeth” de Verdi con Urmana, Currentzis y Tcherniakov en DVD

El sello BelAir, distribuido en españa por Harmonia Mundi Ibèrica, ha publicado en DVD y Blu-Ray Macbeth de Verdi dirigido por el joven griego Teodor Currentzis (n. 1972), y es tan sobresaliente su labor aquí que, o mucho me equivoco, o estamos ante director de orquesta muy a tener en cuenta. Formado en San Petersburgo, lo primero que le escuché a Currentzis fue un Requiem de Mozart horripilante, dirigido (es un decir) tras una penosa indisgestión de instrumentos originales, plaga que está haciendo estragos entre jóvenes talentos (y algunos no tan jóvenes), quienes, quizá para evitar ser tachados de anticuados, dirigen sin convicción siguiendo esta moda (que me sigue pareciendo un tremendo paso atrás cuando se trata de obras tan progresivas para su tiempo como la referida última partitura de Mozart, o la Sinfonía “Heroica”, masacrada hasta la caricatura en los Proms por el hipertalentoso Yannick Nézet-Séguin).

Pero volviendo a Macbeth: ¡qué gran sorpresa después del susodicho Requiem! Currentzis se encuentra como pez en el agua en el joven Verdi, y hace que la Orquesta de la Ópera de París suene a más no poder como debe sonar una tragedia primeriza de los “años de galeras”: fortes contundentes, cortantes, con el metal destacado pero perfectamente empastado con el resto de la masa orquestal; su modelo parece ser el mejor de los posibles: Muti (en su grabación para EMI). Currentzis posee además un sentido como “nato” del drama; los acompañamientos rítmicos tan típicos de ese joven Verdi están articulados con enorme nitidez, y son regulares pero flexibles, siguiendo con maleabilidad a los cantantes; además, acierta a “acompañar” las frases más melódicas con perfecta envoltura de los arcos. El concertante final del acto I, tras revelarse la muerte del rey Duncan, está llevado de forma sencillamente magistral. Y el

coro “Patria oppressa”, otra de las páginas más admirables de la partitura, está dicha con serena e intensa emoción, con una desolación conmovedora. Me he repasado, a continuación de éste, el DVD de Chailly (D.G.), con Nucci, Verrett y Ramey, para el film de Claude d’Anna, y, la verdad, el director milanés no se sitúa a tan alto nivel. Creo que sólo las batutas de Muti y Abbado le superan (y no mucho).

Otra cuestión son los cantantes, entre los que falla, sin paliativos, el protagonista, Dimitris Tiliakos, un barítono demasiado lírico (Macbeth requiere uno de los más dramáticos de todo Verdi) y de desagradable voz caprina. No canta mal, pero tampoco ahonda gran cosa en el personaje. Violeta Urmana, en cambio, será posiblemente la Lady Macbeth número uno de nuestro tiempo: impresionante su capacidad vocal para todas las enormes exigencias de esta parte dramática de agilidad (aunque no sube al opcional Re bemol al final de “Una macchia”), pero no se limita a “darlas todas” en lo meramente canoro, sino que compone un personaje de gran riqueza psicológica. Muy bien aún Ferruccio Furlanetto como Banco: aunque la voz está algo gastada, transmite sentimiento trágico y gran autoridad. Y correcto Stefano Secco como Macduff, un tenor lírico de timbre agradable y buena línea, que sin embargo sale al final de su aria un poco “por peteneras”, o sea, tirando a verista.

La escena de Dmitri Tcherniakov me ha parecido muy acertada, y su traslado de época y lugar no encaja mal ni resulta en líneas generales caprichosa; por el contrario, posee hallazgos de gran fuerza. La calidad técnica –imagen y sonido– del blu-ray es estupenda, y tiene subtítulos en castellano. (Para terminar: Gerard Mortier ha contratado a Currentzis para dirigir en el Teatro Real Macbeth y alguna otra ópera. Veremos).