Paavo Järvi creo que es mejor director que su padre, Neeme.
Este abarcó mucho, muchísimo, pero casi siempre apretó poco. Paavo, que
ya no es muy joven (56 años) parece mantener en lo que le he escuchado un nivel
aceptablemente alto, sin grandes altibajos, y suele ser serio y sensato. El
concierto de Europa de 2018, el 1º de mayo como siempre, tuvo lugar en el
pequeño y precioso Teatro del Margrave en Bayreuth. La Obertura Leonora III con que dio comienzo, aun sin sonar
genuinamente beethoveniana, estuvo más que correctamente dirigida, sin que se
me ocurra otro reparo. También dirigió con mucho acierto los Wesendonck-Lieder de Wagner, mientras
Eva-Maria Westbroek me dio la impresión de ser a estas alturas una voz en
exceso pesada para esto, y mostrar ya síntomas de cierto desgaste (en el fiato,
en el piano, en la zona alta): los papeles tan dramáticos que ha abordado
últimamente la soprano holandesa (n. 1970) me temo que le están pasando algo de
factura. Aun así, su musicalidad se hizo patente. Como es habitual -salvo en
los grandes maestros beethovenianos- en la Cuarta
Sinfonía no tocó fondo, ni mucho menos, en los dos primeros movimientos,
para remontar en los dos restantes. No sé si fue propina o no, pero el hasta
entonces breve concierto se completó con la Obertura de Las criaturas de Prometeo, en la que, por fin, la Filarmónica de
Berlín sonó con el sonido que atribuimos a la música del genio de Bonn. Y Järvi
alcanzó el momento más feliz de la mañana.
El sello Esoteric ha lanzado en SACD la que para muchos (me
incluyo) es la Primera Sinfonía de Mahler más admirable que conocemos en disco:
la de Klaus Tennstedt con la
Sinfónica de Chicago registrada en público el año 1990, y que EMI editó en DVD.
Ahora suena algo mejor aún; puede que la toma no coincida exactamente con la
filmada, pero en todo caso se parecen como dos gotas de agua. La ejecución
orquestal es absolutamente apabullante, quizá la mejor de todas (las rivales
más próximas, Giulini y Solti, son también con esta arrolladora máquina sinfónica).
Evgeny Kissin y el
Cuarteto Emerson en DG
Deutsche Grammophon publica un doble CD con el programa que
Kissin hizo en febrero de 2018 para Ibermúsica, solo que en aquella ocasión fue
junto al Cuarteto Kopelman, y en el disco el grupo que interviene es el
Cuarteto Emerson. Se trata de la grabación en público de un concierto en el
Carnegie Hall de Nueva York el 27 de abril del año pasado. Ya le puse varios
reparos a la actuación en Madrid: de entrada, que Kissin no parece muy
familiarizado con la música de cámara, en la que el diálogo es crucial. En el
disco vuelve a apreciarse lo mismo. En el magnífico Primer Cuarteto con piano de Mozart (en Sol menor, K 478) volvió a obviar por completo el esencial
clímax del primer movimiento, que Solti (con el Melos, Decca) y Barenboim con
su hijo, Deneyka y Soltani (DG 2018) tienen muy en cuenta. No, no parece el
compositor de Salzburgo lo más adecuado para el temperamento del genial
pianista moscovita (que este año cumple ya 48 años).
Bastante mejor, en lo que se refiere al piano, el Primer Cuarteto, en Do menor, op. 115 de
Fauré, acaso su obra camerística más apreciada. Aun así, la presencia del
instrumento de teclado no siempre encuentra el protagonismo conveniente. Por
fin en el formidable Quinteto en La
mayor, op. 81 de Dvorák Kissin dio de sí todo lo que puede esperarse de él.
Pero, ¡ay!, el Emerson no estuvo, en ningún momento del programa, a su altura.
Hace años sus ejecuciones eran impecables, aunque nunca me entusiasmaron como
intérpretes (su ciclo Beethoven me parece bastante lamentable, si bien algunos
cuartetos del siglo XX los resolvieron con éxito). Ya no tocan igual de bien
que hace años, lo que resulta bastante perceptible aquí y allá, y además
tienen una inocultable tendencia a lo en exceso blando y dulzón, hasta rozar a
veces lo gangoso. ¡Mejor hubiera hecho DG grabando el programa con el Kopelman!
Por no hablar de otros grupos aún bastante preferibles. No he podido escuchar,
por un error en la grabación, la propina: el Scherzo del Quinteto op. 57
de Shostakovich.
Es una pena que un pianista tan fabuloso como Kissin esté
siendo últimamente tan mal "aprovechado" por la industria: tras sus
brillantísimos años grabando para D.G., para Sony y luego para RCA, la etapa de
EMI no ha sido demasiado fructífera, pero los años más decepcionantes están
siendo los de este segundo período para el célebre sello amarillo: un álbum
doble con bastante variables Sonatas de Beethoven grabadas hace diversos años y
en diversos lugares en público, y ahora este otro doble en el que deja bastante
de manifiesto que lo mejor se le da no es la música de cámara, y además no con
los mejores colaboradores. A ver qué más se les ocurre a los gestores del sello
alemán, y al propio pianista.
Hola, Ángel:
ResponderEliminarCon Järvi "senior" pasa un poco como con Gergiev... No será Maazel o Kleiber, pero alguien a quien debemos los estrenos fonográficos de las óperas de Rachmaninov merece un respeto:
https://www.discogs.com/Neeme-J%C3%A4rviGothenburg-Symphony-Orchestra-Rachmaninov-AlekoOpera-In-One-Act-/release/7991944
https://www.discogs.com/Neeme-J%C3%A4rviGothenburg-Symphony-Orchestra-Rachmaninov-The-Miserly-Knight/release/7992040
https://articulo.mercadolibre.com.mx/MLM-649035975-cd-rachmaninov-piano-francesca-da-rimini-neeme-jarvi-_JM
https://www.gramophone.co.uk/review/rachmaninov-alekomiserly-knightfrancesca-da-rimini
Saludos cordiales.
Concretamente las tres (breves) óperas de Rachmaninov están, en mi opinión, entre lo más logrado por Neeme Järvi. Como también Mazeppa de Tchaikovsky o El ángel de fuego de Prokofiev.
EliminarRealmente, "El ángel de fuego" es una de las grandes óperas del siglo XX... Imagino que su carácter "blasfemo" no juega en favor de su popularidad. El registro de Järvi se suma a las grandes aportaciones occidentales a la fonografía operística rusa: el "Boris" de Karajan, el "Onegin" de Solti, "La dama de picas" de Ozawa...
EliminarSaludos cordiales.
Permíteme que te contradiga en lo referente al Boris de Karajan: me parece que traiciona abiertamente el espíritu de Mussorgsky, "puccinizándolo". Para mí, lamejor dirección de Boris es la de un casi desconocido: Jerzy Semkow.
EliminarSí, te había leído por ahí que ese "Boris" con el gran Talvela te gusta... ¿Y Cluytens? ¿Y Abbado? ¿Y la doble versión de tu amigo Gergiev?
EliminarSaludos cordiales.
Por que le gusta tanto el Boris de Semkow? Que otros Boris le parecen buenos? A mi me gusta bastante el de Abbado pero no tengo muchas mas referencias. Supongo que el de Gergiev no le gustara mucho. Gracias
EliminarDe entrada, porque sigue la versión original, no la de Rimsky, bienintencionada pero equivocada, casi traicionera. Y Semkow no solo la sigue, sino que acierta de peno en lo que yo entiendo por el espíritu de Mussorgsky. El de Abbado es opulentísimo e impresionante, aunque creo que tampoco muy fiel a Mussorgsky. Y su protagonismo, Kotcherga, me gusta poco. El de Cluytens, también Rimsky, tiene un elemento trascendental: Christoff, todavía hoy el mejor Boris que he escuchado. Y no, el de Gergiev no me gusta mucho.
EliminarInteresante. Es una opera que me apasiona. Estoy de acuerdo en que la version de Rimsky es bastante traicionera porque oculta la brutalidad (tan rusa por otra parte) de la version original de Mussorgsky. Es increible como en la version original los finales de las escenas estan tan poco trabajados, practicamente acaban como si se le hubiera olvidado a Mussorgsky terminar de componerlos, resulta tan fascinante y tan genial.
EliminarA mi Kotcherga no me disgusta, sobre todo si se le ve actuar en las funcinoes de Salzburgo que hay en youtube de las que se hizo el disco de Abbado en Sony. Interesante que le parezca que la version de Abbado traiciona tambien como la de Karajan el espiritu de Mussorgsky. Comparto su baja nota sobre la de Gergiev y me comprare las de Cluytens y Semkow. Las he oido brevemente y es verdad que Christoff parece impresionante, como los cantantes de esa epoca dorada de la opera en general, inalcanzables en expresividad, es una epoca irrepetible. La de Semkow me ha parecido algo lenta pero eso no suele disgustarme cuando voy entrando en una version. Por que le parece que la Semkow es mas fiel an espiritu de Mussorgksy y que entiende usted por tal? Gracias
Puntualización: la versión de Abbado no me parece tan "puccinizante" (o como se le quiera llamar) como la de Karajan, pero creo que en su grabación de Khovanchina se acerca más al espíritu de Mussorgsky. Este espíritu me resulta muy difícil de explicar, pero tú mismo lo has hecho con mucho acierto al hablar de esa rudeza y pimitivismo, incluso de cierta brutalidad. En cuanto a la versión de Semkow, además tiene al impresionante Talvela y al magnífico Gedda. Y es sorprendente el alto nivel de respuesta de los coros y la orquesta.
Eliminartodo lo que le he escuchado al hijo me ha parecido meritorio..al padre apenas lo conozco, razones de edad, supongo....
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
EliminarNo sé qué edad tienes, pero Neeme Järvi, nacido en 1937, ha estado en activo grabando discos hasta no hace muchos años. No sé exactamente cuántos, pero en el siglo XXI todavía alguno, casi seguro.
EliminarTengo 52 pero empecé a escuchar música en serio a principios de siglo, por lo que he tenido pocas oportunidades de escuchar a Jarvi padre, ya sea en directo la radio, etc....
ResponderEliminar