Opiniones de aquí y allá sobre música clásica, muchas veces a contracorriente, para que conozcan lo que opino algunos más que los amigos con los que me comunico directamente.
domingo, 5 de octubre de 2014
Rimsky-Korsakov, un compositor muy parcialmente conocido
Suites orquestales de tres óperas y La leyenda de la ciudad invisible de Kitej
Scheherazade, el Capricho español y La gran pascua rusa son prácticamente los títulos bien conocidos de Rimsky-Korsakov. Fuera de ellos apenas se oyen o se graban de tarde en tarde las suites de El gallo de oro y El zar Saltán, la Segunda Sinfonía “Antar”, algún aria de aquí y de allá y poco más. Pero de vez en cuando uno descubre verdaderos tesoros casi ocultos de este compositor: la ópera completa El gallo de oro –clarísimo antecedente de El pájaro de fuego de su alumno Stravinsky– es una joya (a propósito, la versión dirigida por Kent Nagano en DVD/Blu-ray, Arthaus, es muy recomendable), o las increíblemente bellas Canciones que hace unos años grabasen Anna Netrebko y Daniel Barenboim (al piano) para D.G.
Pues bien, acabo de comprarme un CD (bueno, es un SACD compatible) y un Blu-ray que han sido nuevos descubrimientos. El primero, del sello Pentatone, contiene las suites orquestales de las óperas La doncella de nieve y La leyenda de la ciudad invisible de Kitej y de la ópera-ballet Mlada (en concreto de su tercer acto, con el título Noche en el Monte Triglav). Ante este disco, editado en 2010, me mostré en su día reticente, pues lo dirige un músico que no goza generalmente de mi aprecio, Mikhail Pletnev. Pues bien, mi amigo Juan Ignacio de la Peña me lo hizo escuchar hace poco sin decirme de qué se trataba, y me encantó, así que me he hecho con él. Al frente de la Orquesta Nacional Rusa, que aquí suena estupendamente, el pianista y director exhibe una gran sensibilidad tímbrica para poner de relieve el extraordinario (y bien conocido) talento de Rimsky como orquestador, así como su inagotable imaginación para sugerir ambientes exóticos del extremo oriente. El disco, grabado en Hilversum, Holanda, suena maravillosamente como SuperAudioCD.
Marc Albrecht
El Blu-ray contiene la referida ópera La leyenda de la ciudad invisible de Kitej (1904) completa, una partitura de algo más de tres horas de duración, que, a decir de los conocedores, es uno de los mayores logros de su autor. Penúltima obra escénica de Rimsky, seguida sólo por El gallo de oro y de cariz muy distinto, es una composición no sólo muy bien construida sobre un libreto excelente de Vladimir Belsky, sino de una riqueza –poesía, dramatismo, intimismo y sentido épico, elevación espiritual, etc.– e inspiración musical sorprendente y, por descontado, maravillosamente orquestada. No es una ópera fácil de apreciar, pero merece la pena escucharla más de una vez, revelando a cada audición más bellezas.
La grabación de Opus Arte es muy satisfactoria en lo musical, contando con un elenco sólido y acertado en el que destacan la soprano o mezzo lírica Svetlana Ignatovich (Fevroniya), los tenores Maxim Aksenov –lírico, joven y pujante– como Vsevolod y John Daszak –lírico-spinto, muy prometedor– como Kuterma, el sólido barítono Alexey Markov (Poyarok), y los bajos Vladimir Ognovenko (un Burunday ya algo fatigado) y Vladimir Vaneev, Yuri de voz no muy rotunda pero muy buena línea. La Orquesta Filarmónica de Holanda está estupenda, y ¡magnífico! el Coro de la Ópera Holandesa. La labor del director Marc Albrecht (n. 1964, hijo de Georg Alexander, no de Gerd) me parece sencillamente ejemplar.
Últimamente oigo mucho poner como ejemplo de director de escena arbitrario y extravagante a Dmitri Tcherniakov, y no faltan razones para etiquetarlo así a la vista de varias de sus producciones, pero aquí me parece que da de lleno en el clavo, con una concepción de indudable belleza y elevación poética, plagada de aciertos; sin excentricidades, que yo sepa. Vuelve así el certero autor de la grabación (DVD/Blu-ray C Major) de El jugador de Prokofiev, la primera ópera que le vi. Tanto el sonido como la imagen del Blu-ray son a pedir de boca, pero la edición, que añade veinte minutos de entrevistas, carece de subtítulos en español (los tiene en inglés, francés, alemán, holandés, japonés y coreano) y en el libretillo no figuran los tracks, lo que acarrea una gran incomodidad.
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Desde hace un año, aproximadamente, Opus Arte ha eliminado los subtítulos en castellano (así como en italiano), sustituyéndolos por el japonés y el corenano. Creo que podrían incluirlos todos, como hace Arthaus y otros sellos (cada vez menos, ciertamente).
ResponderEliminarEn fin, ellos sabrán.
Un saludo,
Alberto.
Sí, Alberto, es una desgracia que supriman los subtítulos en castellano. Me temo (esa explicación reciben los distribuidores de los fabricantes) que hay más hablantes de japonés ¡y de coreano! que de español que compran dvds/blu-rays de música clásica. Es sólo cuestión de números. Me temo que mientras en Hispanoamérica no haya más melómanos esto no va a cambiar. Lo cierto es que es un círculo vicioso: sin subtítulos en castellano venderán menos y menos.
EliminarHola Ángel, aprovecho la ocasión comentar algunas cosas relacionadas con este artículo, ya que Rismki Korsakov se encuentra entre mis compositores predilectos, y tengo muchos discos de él, encuentro en su música, ajena a grandes "profundidades", humanismos, trascendencias, etc; un grandísimo placer musical, de alguna manera parecido al que siento por la música de Haydn, salvando las distancias de importancia histórico-musical de uno y otro, en el sentido en que en ambos encuentro un disfrute en su "música pura", en el placer de escuchar música, sin tener que entrar en otras consideraciones...
ResponderEliminarEn fin, que soy un "loco" del Rismki, y que también poseo el SACD de Pletnev que comentas, que me parece muy estimable, pero si te gusta esta música, y tienes un poco de tiempo, te recomiendo que escuches las versiones de Svetlanov, para la casa Melodiya (conseguibles en un blog llamado Panovnik, que, por cierto, no tiene desperdicio)... Por ejemplo, en el caso de la suite del "El gallo de Oro", canta las melodías como ningún otro director (p.ej., en el primer movimiento de la suite, la melodía de la "siesta" del rey, que es bellisima, hace cantar a las cuerdas con un abandono total... en esto he escuchado varias versiones: Dorati, Serov, Jarvi, incluso a Markevitch, y en mi modesta opinión, nadie se le acerca... bueno sí, curiosamente, dos ediciones de Naxos, una de Igor Golovschin (que "casualmente" fue asistente del propio Svetlanov, y algo bueno aprendería de él...) y la otra de un tal Schwarz, que suena magníficamente y está también muy
bien "cantada").
También tengo la versión de la ópera completa de Nagano, y coincido contigo en que es una muy notable versión, con una dirección y unos cantantes a la altura de las circunstancias... y de la ópera, ¿qué decir?, me parece una gran música, deliciosa (de hecho a mi hija de 3 años también le encanta, ya que es como cuento que les puede resultar bastante atractivo a los pequeños si les vas explicando),
Y por último, porque sé que me estoy "enrollando" más de la cuenta, te hablaré de mi obra favorita de Rismki, que no es otra que "Antar", y también te animo a que escuches la versión de Svetlanov, sobre todo la de Melodiya de los años 70, con la orquesta de la URSS, increíblemente cantada cuando hace falta, y con sobrada energía también cuando lo requiere... aquí también he hecho múltiples comparativas: Jarvi, Arnsemet, Monteux,Tjenavorian, y unas cuantas versiones más de directores "rusos", y tampoco encuentro parangón entre su versión y el resto...
En fin, recibe un saludo muy cordial, disculpa si me extendí demasiado, y se despide un admirador de tu blog.
Atentamente, Francisco Mármol
Muchas gracias por tu información, útil para mí y para todos los lectores, al provenir de un verdadero conocedor de Rimsky-Korsakov.
EliminarDe "Antar" tengo dos grabaciones: Philharmonia/Svetlanov (Hyperion 1990) y Pittsburgh/Maazel (Telarc 1986 o 1994) ¿Qué opinas de estas versiones?
Hola Ángel, lo primero agradecerte tu atención, lo segundo, bueno, gracias también por lo de "verdadero conocedor" de Rimski, aunque creo que no es para tanto, sí reconozco que me gusta mucho su música y he intentando escuchar bastantes versiones de las piezas que más me gustan de él... y en concreto de Antar, he escuchado 7 u 8 versiones, curiosamente la de Maazel no la tengo ni la he escuchado (y estaría encantado de hacerlo, aunque sólo sea para disfrutar del "sonido Telarc"), la de Svetlanov/Hyperion sí la tengo, me parece una grandísima versión, similar en tempi a la de Melodiya, pero me gusta más como acentúa en la de Melodiya, tiene como más "rítmo" o más "intención" (la puedes conseguir en el blog "Panovnik", que ya verás, es un "pozo sin fondo" de música e intérpretes rusos). Por cierto, en el mismo disco supongo que recuerdas que hay una versión de "La Pascua Rusa" que me parece extraordinaria...
ResponderEliminarTambién te quería comentar que no sé si el blog es la mejor manera de comunicarme contigo, aunque de momento es la única, espero que no te sepa mal que en ocasiones me extienda demasiado, pero es "lo que me sale" (aunque alguna vez me planteo si extenderme tanto es excesivo en el contexto de un blog, no sé, ya me dirás tu opinión como "dueño" del blog).
Un saludo cordialísimo, Ángel.
Atentamente,
Francisco Mármol
Puedes extenderte cuanto quieras, no veo el menor problema en ello.
EliminarEl disco Telarc de Maazel contiene también una buena versión de la Segunda Sinfonía "Ucrania" de Tchaikovsky, pero me temo que hoy es difícil encontrarlo.
Gracias.